(La parábola de los talentos,
por el Espíritu Santo - D.J)
«Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos. Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos. Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor. Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos. Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos. Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre ellos. Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo. Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses. Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado. Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.»
(S. Mateo 25:14-30).
Es claro el significado de esta
parábola de parte de Jesús.
El hombre de la parábola representa a Jesús, los siervos somos nosotros y los talentos son el patrimonio que el Señor nos confía.
¿Cuál es el patrimonio?
Su Palabra, la fe en el Padre celestial, su perdón... en definitiva, muchas cosas, sus bienes más preciosos.
Éste es el patrimonio que Él nos confía.
No sólo para custodiar, sino para fructificar.
Mientras que en el uso común el término «talento» indica una destacada cualidad individual, por ejemplo el talento en la música, en el deporte, etc.
En la parábola los talentos representan los bienes del Señor, que Él nos confía para que los hagamos fructificar.
El hoyo cavado en la tierra por el siervo malo y perezozo indica el miedo a arriesgar que bloquea la creatividad y la fecundidad del amor. Porque el miedo a los riesgos del amor nos bloquea.
Jesús no nos pide que conservemos su gracia en una caja fuerte. Jesús no nos pide esto, sino más bien quiere que la usemos en beneficio de los demás.
Todos los bienes que hemos recibido son para darlos a los demás, y así crecen.
Es como si nos dijera:
«Aquí tienes mi misericordia, mi ternura, mi perdón: tómalos y haz amplio uso de ello».
Y nosotros, ¿qué hemos hecho con ello? ¿A quién hemos «contagiado» con nuestra fe? ¿A cuántas personas hemos alentado con nuestra esperanza? ¿Cuánto amor hemos compartido con nuestro prójimo?
Son preguntas que nos hará bien plantearnos. Cualquier ambiente, incluso el más lejano e inaccesible, puede convertirse en lugar donde fructifiquen los talentos...
Esta parábola nos alienta a no esconder nuestra fe y nuestra pertenencia a Cristo, a no sepultar la Palabra del Evangelio, sino a hacerla circular en nuestra vida, en las relaciones, en las situaciones concretas, como fuerza que pone en crisis, que purifica y renueva.
Así también el perdón que el Señor nos da especialmente en el sacramento de la Reconciliación: no lo tengamos cerrado en nosotros mismos, sino dejemos que irradie su fuerza, que haga caer los muros que levantó nuestro egoísmo, que nos haga dar el primer paso en las relaciones bloqueadas, retomar el diálogo donde ya no hay comunicación... Y así sucesivamente.
Hacer que estos talentos, estos regalos, estos dones que el Señor nos dio, sean para los demás, crezcan, produzcan fruto , con nuestro testimonio.
Además, el Señor no da a todos las mismas cosas y de la misma forma: nos conoce personalmente y nos confía lo que es justo para nosotros; pero en todos, en todos hay algo igual: la misma e inmensa confianza.
Dios se fía de nosotros, Dios tiene esperanza en nosotros. Y esto es lo mismo para todos. No lo decepcionemos. No nos dejemos engañar por el miedo, sino devolvamos confianza con confianza.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
|| Oración: Padre. Ayúdanos a no ser como este siervo, donde se guardó todo lo que su amo le dio para producir nuevos frutos, talentos, etc... Ni nos permitas que nos olvidemos que todo lo que tenemos, Todo viene de Ti, nada viene de nosotros, y Todo vuelve a Ti Papá!! Ayúdanos a bendecir al prójimo con todo lo que nos pones en nuestras manos y en nuestras vidas, sabiendo que todo lo que aquí hay en la tierra, quedará aquí cuando partamos a las nuevas moradas que nos estás preparando. Danos mucha más sabiduría para ser más buenos administradores de los talentos que nos des cada día para TuGloria.
Te lo pido todo, en el nombre de tu hijo amado Jesús.
Amén.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
=*=
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
#hedecididoseguiracristo
#God #Jesus #HolySpirit
#Love #Faith #Hope
#Holiness #BrokenChains
#GodIsGood #GodIsAble #GodIsAlive
#visible #iglesiavisible #Cristovisible
#YosoyVisible
#Gospel #AmazingGrace
=*=